Domingo, 27 de septiembre de 2009
A prop?sito de Mistura: ?El combo es el opio del pueblo?
De un tiempo a esta parte la comida peruana se ha convertido en el eje de nuestra "nacionalidad". Gast?n Acurio es una especie de pr?cer de la independencia y quinta esencia del desarrollo, todos los muchachos del cono norte estudian gastronom?a, la gente solo piensa en comer y la feria mixtura rebalsar? de multitudes salivantes.
Hasta all? todo bien si no fuera porque este "boom" del trague, sirve para imponer en el sentido com?n una serie de ideas falsas: El Per? es solamente su comida, la suprema manifestaci?n de la cultura es la pancita y el tiradito y frente al placer de comer, todas las dem?s manifestaciones del esp?ritu se disuelven.
Bajo la cubierta de un hedonismo digestivo se esconde un est?ril come, calla y cr?ete la comedia del ?xito. Devora hasta abotagar el cerebro. Come como en la gloria y procesa tu arribismo social con el p?loro bien lleno. Olvida que la chanfainita y los anticuchos proceden de las cocinas esclavas, y que la causa fue consecuencia de la inanici?n de las tropas andinas en la independencia.
Nadie rememora frente al plato que la poes?a es mejor que los frejoles y la bondad superior al mondonguito. Que Mart?n Ad?n es m?s peruano y universal que el prosaico tacu-tacu. Pan y circo, en un solo "combo" a doce soles, propagandiza Meche Araoz, la maestra carnicera de Bagua. Vivan los TLCs y la triunfante internacionalizaci?n del Per?. Como si la pizza fuera Italia. (*)
No, yo no me trago eso de que con el patrocinio de la comida peruana y con el buche saturado de grasas estamos haciendo patria. Hay cosas m?s importantes, se?ores, que andar como carneros persiguiendo un ranfa?ote en el parque de la exposici?n. Recordemos que el 40 por ciento de los peruanos siente hambre, que hay familias altoandinas que solo pueden darle diariamente a sus hijos un caldito de chu?o. ?Por qu?? Sencillamente porque sus exquisitas variedades de papas de altura son compradas a diez c?ntimos el kilo. ?El mercado va a resolver eso? Las huiflas. Ni Gast?n ni papitas Lays van a componer estas cong?nitas asimetr?as del "lasse faire", ni perfumar las v?sceras del capitalismo nativo. Comprar la producci?n de papa y establecer precios de refugio es tarea redistributiva del Estado. ?O no?
Ya se que me van a acusar de aguafiestas. Ni hablar, vayan, coman y divi?rtanse. Provecho. Pero ante el primer olluquito piensen en el hambre nacional y las fijaciones orales de nuestro op?paro presidente. Y cuando se empuje un sabros?simo cebiche desconf?e de las franquicias gastron?micas, que no nos van a conducir al primer mundo. Y si ante tanta reflexi?n se les indigesta el caucau, comprueben que los jugos g?stricos no son la fuente de la conciencia nacional, sino un buen mecanismo de market?ng y nada m?s.
Fuente: Blog de Rodrigo Nu?ez