Domingo, 21 de septiembre de 2008
Contra la coca; cacao y caf? org?nico
Lucha contra las drogas en el Perú (Foto:Mininter)
La hoja de coca aún cuenta con 54.000 hectáreas cultivadas en todo Perú y ocupa a 50.000 familias, pero ha encontrado un serio competidor en dos productos al alza en el mercado mundial: el cacao y el café orgánico.
En el departamento de San Martín (noreste), uno de los más afectados en las dos últimas décadas por el cultivo y procesamiento de la coca, donde se han llegado a deforestar 1,6 millones de hectáreas, se ha puesto en marcha un exitoso proyecto de sustitución de cultivos que ahora el gobierno quiere exportar al resto de Perú.
Sisley Cachique Salas y Roland Salas Salas son dos campesinos de la "Cooperativa Oro Verde" con 1.190 socios -más 400 en lista de espera- que un día decidieron abandonar la coca y pasarse al cacao y el café y hoy son el orgullo de Tarapoto, la capital de hecho de este departamento.
"No teníamos tranquilidad, vivíamos permanentemente asustados", recuerda Roland Salas de aquellos días en que el cultivo y el procesamiento de la hoja de coca daba de comer a una región donde el Estado estaba ausente y la seguridad la proporcionaban, a cambio de droga o víveres, los que llama "los subversivos".
Prefieren la tranquilidad a la riqueza
No solo la presencia intermitente de hombres armados perturbaba la vida de estos verdes valles, sino también la deforestación -hace falta arrasar tres hectáreas de bosque para tener una de coca- y la enorme contaminación de las "pozas de maceración" donde la hoja de coca se convierte en pasta base tras mezclarse con productos químicos.
Ahora Sisley y Salas producen café orgánico y cacao que les comercializa la cooperativa y confían en no volver nunca a la coca, porque -aseguran- la riqueza no compensa los sobresaltos que significa la ilegalidad.
Cooperativas como esta están proliferando por todo el departamento y han llegado al mismo Tocache -a ocho horas por pista de Tarapoto-, lugar emblemático en Perú en los años del "boom" cocalero y donde, según su alcalde David Bazán, "no se podía ni entrar en los años noventa".
Tocache ya fue beneficiario en los pasados cinco años de una donación de 10 millones de euros (casi 14 millones de dólares) de la Cooperación Técnica Alemana para apoyar la sustitución de cultivos, un proyecto tan satisfactorio que ya tiene una segunda fase por una cantidad similar pero cuyos ejes aún están por determinar.
Críticos: Campesinos son se ven beneficiados por programas de sustitución
El alcalde asegura que su pueblo vive una prosperidad envidiable, pero no le faltan críticos: en su mismo pueblo Walter Satalaya, de la Federación de Cocaleros Agropecuarios, asegura que son muchos los campesinos que no reciben los beneficios del programa de sustitución, y dice que ese programa "se siembra en los campos pero sólo se cosecha en las computadoras".
Satalaya pertenece al sector que en Perú siguen oponiéndose a la erradicación de la coca, entre otras cosas porque cuatro millones de peruanos siguen "chakchando" o masticando la hoja de coca al modo tradicional, y consumen 9.000 toneladas anuales (de las 116.000 que produce el país).
El organismo que en Perú centraliza la lucha anti-droga, Devida, asegura que su batalla no es este consumo tradicional, que piensan seguir garantizando, sino la coca destinada a ser cocaína, que es la única que explica la proliferación imparable de cultivos.
El presidente ejecutivo de Devida explica que, si bien Perú erradica una media de 12.000 hectáreas al año desde hace seis, se plantan todavía más, y el año pasado se cerró con 2.500 hectáreas más que el anterior, muchas de ellas localizadas además en zonas que antes no eran cocaleras, como las fronterizas con Bolivia.
Si San Martín es una experiencia que Pizarro califica de "modélica para Perú y para el mundo", muy distinta es la realidad en otras provincias, como la vecina Huánuco, donde el narcotráfico sigue siendo pujante y los grupos armados campan a sus anchas, según reconocen fuentes de Devida.
¿Por qué está desapareciendo la coca en San Martín? Según reconoce el propio alcalde, erradicador convencido, fue por la debacle de los precios de la coca en aquellos años en que los productores se marcharon a Colombia.
Ahora que la coca vuelve a recuperar precios vertiginosos, solo el cacao y el café "gourmet" pueden hacerle frente. ¿Qué pasará si estos productos también caen un día en el mercado?. EFE
Fuente: RPP Noticias