S?bado, 13 de mayo de 2006
Siete sugerencias para ganar la guerra
Mois?s Naim, es editor de la revista Foreign Policy y aborda el problema de las drogas desde una perspectiva diferente a las tradicionales.
Revista SEMANA-Bogot?, 8 de Mayo 2006
Por Mois?s Naim
Mois?s Naim, editor de la influyente revista Foreign Policy, acaba de publicar un libro donde analiza c?mo los traficantes, los contrabandistas y los piratas est?n aprovechando todas las ventajas de la globalizaci?n para tomar por asalto la econom?a mundial. En su libro "Illicit", Naim estudia el narcotr?fico m?s como un fen?meno econ?mico que como uno moral. Sus conclusiones ayudan a comprender por qu? ha fracasado la lucha contra las drogas y por qu? seguir? siendo una guerra perdida mientras no se cambie su enfoque.
Naim destaca la importancia de darle una soluci?n definitiva al problema. Especialmente porque considera que el tr?fico il?cito internacional est? dividiendo al mundo ya no entre Oriente y Occidente sino entre lo que llama ?puntos luminosos? y ?hoyos negros?. Estos hoyos negros son los lugares donde las redes de tr?fico ilegal de productos ?desde las drogas hasta el tr?fico de personas- viven y crecen. ?Los gobiernos en pa?ses menos desarrollados que ya son d?biles, ser?n debilitados a medida que las redes ilegales en ese territorio amasen nuevas fortunas. Inevitablemente estas redes invertir?n en la compra de influencia pol?tica y capacidad militar para combatir al gobierno?. Estas son las propuestas que ?l hace en su libro ?que saldr? en espa?ol el pr?ximo semestre- para darle un giro a esta cruzada:
Cambiar la forma de entender el problema:
Naim dice que ?hay que corregir el problema de aprendizaje que ha bloqueado el progreso contra el crimen global?. En particular, dice que es clave entender que:
- El narcotr?fico ha evolucionado considerablemente desde la ?poca de Pablo Escobar. El negocio ya no est? en manos de carteles familiares con una estructura vertical, sino que se maneja a trav?s de redes, que ya no se especializan solo en el tr?fico de drogas sino en todo tipo de tr?fico de productos, incluyendo el tr?fico de personas. ?Mientras que los carteles colombianos hab?an sido m?s o menos organizaciones verticales concentradas en un solo producto, los grupos mexicanos se concentraron en controlar el paso de la frontera y participan directa o indirectamente en el movimiento de una variedad de productos a trav?s del borde. A trav?s de sociedades con los ucranianos, y los chinos, entraron tambi?n en el negocio del tr?fico de personas. Tambi?n se especializaron en el lavado de activos?, dice Naim en su libro.
- La globalizaci?n ha hecho que el negocio de las drogas sea m?s r?pido, eficiente y f?cil de esconder. Se ha fusionado con la econom?a global. La descentralizaci?n permite reflejar los avances tecnol?gicos, baja el costo de la operaci?n porque reduce los riesgos de ser detectado, permite aumentar el control y la rentabilidad de las fuentes de oferta y demanda.
- Hay una explosi?n global de la oferta y la demanda. ?Aunque Estados Unidos sigue siendo de lejos el mayor consumidor y Colombia el mayor productor de coca?na, durante los 90, el n?mero de pa?ses que report? serios problemas de adicci?n creci?. La explosi?n global de la oferta y la demanda ha acabado con la ilusi?n de invulnerabilidad que muchos gobiernos tuvieron durante a?os. Rusia, Jap?n, India, Sud?frica, Brasil y M?xico son solo algunos de los pa?ses donde el consumo de droga se ha vuelto un problema de salud p?blica?, afirma en el libro. Tambi?n explica c?mo los traficantes de drogas ya no vienen s?lo de los pa?ses productores, sino de pa?ses que escasamente la cultivan, como Nigeria.
- La revoluci?n financiera de la ?ltima d?cada es la que m?s ha beneficiado el negocio de las drogas. La banca por Internet, los servicios de giro, los servicios de sindicaci?n de pr?stamos y de comisionistas han facilitado las grandes transacciones de dinero.
Evitar la tentaci?n de recurrir a la indignaci?n moral como base de la pol?tica p?blica.
?Durante mucho tiempo hemos permitido que las exhortaciones morales reemplacen un an?lisis honesto del problema?, dice Naim, y sugiere entender que:
- El tr?fico ilegal es un fen?meno econ?mico, no moral. ?Hasta que los traficantes no enfrenten menores incentivos para traficar: menor demanda, m?rgenes inferiores, mayores riesgos, es f?til hablar de otros remedios?, dice.
- El tr?fico ilegal es un fen?meno pol?tico: los traficantes no pueden prosperar sin la complicidad y la colaboraci?n de agentes del gobierno. ?El tr?fico ilegal no puede ser entendido y combatido efectivamente si no se coloca la econom?a y la pol?tica que lo jalona en el centro del an?lisis y de las recomendaciones?.
- El tr?fico ilegal es m?s acerca de transacciones que de productos: Hay que pensar en los traficantes como agentes econ?micos que han desarrollado especialidades funcionales, no nichos de productos. ?En cambio de distinguir entre traficantes, mulas, coyotes, pitufos, es mejor pensarlos seg?n los roles que juegan: inversionistas, banqueros, empresarios, comisionistas, transportadores, vendedores al por mayor, log?sticas, distribuidores?, agrega.
- El comercio ilegal no puede existir sin el tr?fico legal.
- El tr?fico ilegal involucra a todo el mundo. ? Nunca avanzaremos si ponemos toda nuestra atenci?n en los proveedores de los productos ilegales y no en la gente de bien cuyo apetito por esos productos crea los incentivos que los hace posible?.
- Los gobiernos no pueden actuar solos
Desarrollar y aplicar la tecnolog?a que sirva para combatir el tr?fico ilegal:
Naim sugiere invertir grandes sumas de dinero en identificadores de frecuencias radiales, tecnolog?as de identificaci?n de productos como c?digos de barras sofisticados, biom?trica para identificar a una persona seg?n su voz, el iris del ojo, o la forma de la cara. Escanners sofisticados, interceptaci?n de llamadas, software contra el lavado de activos, software con GPS para ubicar gente. En Brazil, algunos empresarios est?n implant?ndose microchips para que los ubiquen en caso de un secuestro, por ejemplo. Tambi?n sugiere que los gobiernos inviertan en biotecnolog?a. Cuenta c?mo una compa??a inglesa llamada Xenova, ha probado una vacuna contra la coca?na que ayud? al 58 por ciento de los usuarios a abandonar el h?bito.
Cambiar la forma de operar del gobierno:
La soluci?n debe involucrar una organizaci?n gubernamental con el alcance, la autoridad y las habilidades para combatir todo el espectro de actividades ilegales. Sugiere crear Comit?s Especiales (Task Forces) en los que trabajen polic?as junto con abogados, contadores, economistas, ingenieros de sistemas y cient?ficos sociales de tal forma que puedan combatir el tr?fico de una manera integral y con un presupuesto a varios a?os.
Que los gobiernos tengan metas que pueden cumplir.
Naim sugiere que el combate a la lucha contra las drogas est? guiado por dos principios: c?mo quitarle valor a la actividad ilegal y c?mo reducir su da?o. ?Es decir, mida el da?o social que una actividad ilegal causa y compare la forma de combatirla de acuerdo a c?mo reduce su da?o?, dice. Por ejemplo, muchos pa?ses han priorizado el tratamiento de adictos por encima de encarcelamiento, o en intercambio de agujas y educaci?n sobre el Sida para los adictos. ? La conclusi?n es que la desregulaci?n, la descriminalizaci?n y la legalizaci?n tienen que ser opciones de pol?tica, sujetas al test de que reducen el valor a los traficantes y el da?o a la sociedad. Tambi?n significa que las pol?ticas que no han probado tener este efecto deben reevaluarse?.
Combatir un problema global con una soluci?n global:
La cooperaci?n internacional es clave. ? Las drogas son cada vez m?s dif?ciles de controlar en su fuente, ya que las fuentes de producci?n de droga se est?n multiplicando: ya sea porque hay nuevos productores de varias drogas, enclaves rebeldes en un pa?s, o sustitutos que se han vuelto hubs privilegiados de paso para las drogas?. Naim explica c?mo a medida que llegan a mercados de alto valor, las drogas son frecuentemente combinadas con otros productos l?citos e il?citos, no simplemente camuflados detr?s de lavadoras o dentro de mu?ecos sino que forman parte de complejos movimientos de productos y plata que involucran varios intermediarios y lugares. Por eso la coordinaci?n internacional es fundamental para superar las fronteras, que es la principal ventaja con la que cuentan los traficantes sobre los gobiernos, m?s limitados a actuar dentro de los bordes de cada pa?s.
Involucrar a toda la sociedad:
Naim resalta la importancia de construir una voluntad pol?tica alrededor del problema y por eso se?ala la importancia de que todos los miembros de la sociedad entiendan qui?n se beneficia de el tr?fico ilegal de drogas y qui?n paga el costo.
Revista SEMANA-Bogot?, 8 de Mayo 2006
Por Mois?s Naim
Mois?s Naim, editor de la influyente revista Foreign Policy, acaba de publicar un libro donde analiza c?mo los traficantes, los contrabandistas y los piratas est?n aprovechando todas las ventajas de la globalizaci?n para tomar por asalto la econom?a mundial. En su libro "Illicit", Naim estudia el narcotr?fico m?s como un fen?meno econ?mico que como uno moral. Sus conclusiones ayudan a comprender por qu? ha fracasado la lucha contra las drogas y por qu? seguir? siendo una guerra perdida mientras no se cambie su enfoque.
Naim destaca la importancia de darle una soluci?n definitiva al problema. Especialmente porque considera que el tr?fico il?cito internacional est? dividiendo al mundo ya no entre Oriente y Occidente sino entre lo que llama ?puntos luminosos? y ?hoyos negros?. Estos hoyos negros son los lugares donde las redes de tr?fico ilegal de productos ?desde las drogas hasta el tr?fico de personas- viven y crecen. ?Los gobiernos en pa?ses menos desarrollados que ya son d?biles, ser?n debilitados a medida que las redes ilegales en ese territorio amasen nuevas fortunas. Inevitablemente estas redes invertir?n en la compra de influencia pol?tica y capacidad militar para combatir al gobierno?. Estas son las propuestas que ?l hace en su libro ?que saldr? en espa?ol el pr?ximo semestre- para darle un giro a esta cruzada:
Cambiar la forma de entender el problema:
Naim dice que ?hay que corregir el problema de aprendizaje que ha bloqueado el progreso contra el crimen global?. En particular, dice que es clave entender que:
- El narcotr?fico ha evolucionado considerablemente desde la ?poca de Pablo Escobar. El negocio ya no est? en manos de carteles familiares con una estructura vertical, sino que se maneja a trav?s de redes, que ya no se especializan solo en el tr?fico de drogas sino en todo tipo de tr?fico de productos, incluyendo el tr?fico de personas. ?Mientras que los carteles colombianos hab?an sido m?s o menos organizaciones verticales concentradas en un solo producto, los grupos mexicanos se concentraron en controlar el paso de la frontera y participan directa o indirectamente en el movimiento de una variedad de productos a trav?s del borde. A trav?s de sociedades con los ucranianos, y los chinos, entraron tambi?n en el negocio del tr?fico de personas. Tambi?n se especializaron en el lavado de activos?, dice Naim en su libro.
- La globalizaci?n ha hecho que el negocio de las drogas sea m?s r?pido, eficiente y f?cil de esconder. Se ha fusionado con la econom?a global. La descentralizaci?n permite reflejar los avances tecnol?gicos, baja el costo de la operaci?n porque reduce los riesgos de ser detectado, permite aumentar el control y la rentabilidad de las fuentes de oferta y demanda.
- Hay una explosi?n global de la oferta y la demanda. ?Aunque Estados Unidos sigue siendo de lejos el mayor consumidor y Colombia el mayor productor de coca?na, durante los 90, el n?mero de pa?ses que report? serios problemas de adicci?n creci?. La explosi?n global de la oferta y la demanda ha acabado con la ilusi?n de invulnerabilidad que muchos gobiernos tuvieron durante a?os. Rusia, Jap?n, India, Sud?frica, Brasil y M?xico son solo algunos de los pa?ses donde el consumo de droga se ha vuelto un problema de salud p?blica?, afirma en el libro. Tambi?n explica c?mo los traficantes de drogas ya no vienen s?lo de los pa?ses productores, sino de pa?ses que escasamente la cultivan, como Nigeria.
- La revoluci?n financiera de la ?ltima d?cada es la que m?s ha beneficiado el negocio de las drogas. La banca por Internet, los servicios de giro, los servicios de sindicaci?n de pr?stamos y de comisionistas han facilitado las grandes transacciones de dinero.
Evitar la tentaci?n de recurrir a la indignaci?n moral como base de la pol?tica p?blica.
?Durante mucho tiempo hemos permitido que las exhortaciones morales reemplacen un an?lisis honesto del problema?, dice Naim, y sugiere entender que:
- El tr?fico ilegal es un fen?meno econ?mico, no moral. ?Hasta que los traficantes no enfrenten menores incentivos para traficar: menor demanda, m?rgenes inferiores, mayores riesgos, es f?til hablar de otros remedios?, dice.
- El tr?fico ilegal es un fen?meno pol?tico: los traficantes no pueden prosperar sin la complicidad y la colaboraci?n de agentes del gobierno. ?El tr?fico ilegal no puede ser entendido y combatido efectivamente si no se coloca la econom?a y la pol?tica que lo jalona en el centro del an?lisis y de las recomendaciones?.
- El tr?fico ilegal es m?s acerca de transacciones que de productos: Hay que pensar en los traficantes como agentes econ?micos que han desarrollado especialidades funcionales, no nichos de productos. ?En cambio de distinguir entre traficantes, mulas, coyotes, pitufos, es mejor pensarlos seg?n los roles que juegan: inversionistas, banqueros, empresarios, comisionistas, transportadores, vendedores al por mayor, log?sticas, distribuidores?, agrega.
- El comercio ilegal no puede existir sin el tr?fico legal.
- El tr?fico ilegal involucra a todo el mundo. ? Nunca avanzaremos si ponemos toda nuestra atenci?n en los proveedores de los productos ilegales y no en la gente de bien cuyo apetito por esos productos crea los incentivos que los hace posible?.
- Los gobiernos no pueden actuar solos
Desarrollar y aplicar la tecnolog?a que sirva para combatir el tr?fico ilegal:
Naim sugiere invertir grandes sumas de dinero en identificadores de frecuencias radiales, tecnolog?as de identificaci?n de productos como c?digos de barras sofisticados, biom?trica para identificar a una persona seg?n su voz, el iris del ojo, o la forma de la cara. Escanners sofisticados, interceptaci?n de llamadas, software contra el lavado de activos, software con GPS para ubicar gente. En Brazil, algunos empresarios est?n implant?ndose microchips para que los ubiquen en caso de un secuestro, por ejemplo. Tambi?n sugiere que los gobiernos inviertan en biotecnolog?a. Cuenta c?mo una compa??a inglesa llamada Xenova, ha probado una vacuna contra la coca?na que ayud? al 58 por ciento de los usuarios a abandonar el h?bito.
Cambiar la forma de operar del gobierno:
La soluci?n debe involucrar una organizaci?n gubernamental con el alcance, la autoridad y las habilidades para combatir todo el espectro de actividades ilegales. Sugiere crear Comit?s Especiales (Task Forces) en los que trabajen polic?as junto con abogados, contadores, economistas, ingenieros de sistemas y cient?ficos sociales de tal forma que puedan combatir el tr?fico de una manera integral y con un presupuesto a varios a?os.
Que los gobiernos tengan metas que pueden cumplir.
Naim sugiere que el combate a la lucha contra las drogas est? guiado por dos principios: c?mo quitarle valor a la actividad ilegal y c?mo reducir su da?o. ?Es decir, mida el da?o social que una actividad ilegal causa y compare la forma de combatirla de acuerdo a c?mo reduce su da?o?, dice. Por ejemplo, muchos pa?ses han priorizado el tratamiento de adictos por encima de encarcelamiento, o en intercambio de agujas y educaci?n sobre el Sida para los adictos. ? La conclusi?n es que la desregulaci?n, la descriminalizaci?n y la legalizaci?n tienen que ser opciones de pol?tica, sujetas al test de que reducen el valor a los traficantes y el da?o a la sociedad. Tambi?n significa que las pol?ticas que no han probado tener este efecto deben reevaluarse?.
Combatir un problema global con una soluci?n global:
La cooperaci?n internacional es clave. ? Las drogas son cada vez m?s dif?ciles de controlar en su fuente, ya que las fuentes de producci?n de droga se est?n multiplicando: ya sea porque hay nuevos productores de varias drogas, enclaves rebeldes en un pa?s, o sustitutos que se han vuelto hubs privilegiados de paso para las drogas?. Naim explica c?mo a medida que llegan a mercados de alto valor, las drogas son frecuentemente combinadas con otros productos l?citos e il?citos, no simplemente camuflados detr?s de lavadoras o dentro de mu?ecos sino que forman parte de complejos movimientos de productos y plata que involucran varios intermediarios y lugares. Por eso la coordinaci?n internacional es fundamental para superar las fronteras, que es la principal ventaja con la que cuentan los traficantes sobre los gobiernos, m?s limitados a actuar dentro de los bordes de cada pa?s.
Involucrar a toda la sociedad:
Naim resalta la importancia de construir una voluntad pol?tica alrededor del problema y por eso se?ala la importancia de que todos los miembros de la sociedad entiendan qui?n se beneficia de el tr?fico ilegal de drogas y qui?n paga el costo.